martes, 29 de mayo de 2012

Primeras horas con el Samsung Galaxy SIII


Con más de nueve millones de reservas, algo nunca visto en el mundo de los smartphones, el nuevo Samsung Galaxy SIII empieza hoy a venderse en España. Los principales operadores nacionales ya han anunciado sus ofertas para ofrecer el nuevo terminal, que promete, tal y como sucedió con su predecesor, el Galaxy SII,  convertirse en elteléfono móvil de referencia en la gama alta del sistema operativo Android.
Prestaciones, desde luego, no le faltan: Pantalla de 4,8 pulgadas Super Amoled (la mayor del mercado), procesador de cuatro núcleos a 1,4 GHz, batería de 1.200 miliamperios… Todo contribuye a hacer del nuevo Galaxy la estrella tecnológica del momento. En los test técnicos el smartphone coreano ha mostrado un rendimiento superior al de su más directa competencia: el HTC One X y el Xperia S, de Sony, y ello a pesar de que esos dos terminales se muestran superiores a él an algunos aspectos, como la cámara en el caso de Sony y la capa de software (llamada Sense) que HTC coloca sobre el sistema operativo Android. Pero el mayor enemigo del nuevo terminal no está aún en el mercado: será el iPhone 5, que Apple presentará durante este mismo año.
Pero veamos. Tras un primer y fugaz contacto con el SIII en Londres, durante su presentación oficial, abc.es ha podido analizar uno en profundidad. Lo primero que llama la atención es su enorme pantalla de 4,8 pulgadas (con una resolución de 1280×720 píxeles), que ocupa prácticamente todo el frontal del teléfono. Samsung conserva los tres botones inferiores (uno central físico más otros dos tactiles a los lados), así como el botón de encendido en el lateral derecho y el control de volumen en el izquierdo. Otro punto positivo es la incorporación (¿o habría que decir recuperación?) del led luminoso en la esquina superior izquierda del terminal, que se ilumina en distintos colores para avisarnos de la llegada de nuevos mensajes o alertarnos cuando la batería se está acabando.
A pesar del tamaño de la pantalla, el teléfono se puede sostener cómodamente en la mano. Al cogerlo, sorprende su ligereza (apenas 133 g.), el suave tacto del policarbonato del que está hecha su carcasa y la manejabilidad. Sensaciones que hacen que el terminal parezca mucho más pequeño de lo que es en realidad. Sus bordes son redondeados y recuerdan, aunque el diseño no es igual, a los de su inmediato predecesor. En conjunto, se trata de un terminal bonito, aunque hay que admitir que no tan elegante como puede serlo el HTC One X, cuyo diseño resulta más sofisticado.
Una vez encendido, la pantalla super Amoled cobra vida y refleja los colores con una increíble brillantez. El tamaño de la pantalla, por supuesto, contribuye a que vídeos y fotografías puedan verse con todo detalle. Lo mismo sucede con las páginas web y con los textos, perfectamente definidos y distinguibles sin tener que esforzar demasiado la vista. Son muchos los que piensan que con un teléfono así no es necesario un tablet…
Sin embargo, y como para empequeñecer las buenas impresiones iniciales, el terminal “despega” en cuanto se empiezan a abrir aplicaciones. La potencia del procesador hace quecualquier función que se requiera sea prácticamente inmediata. Los álbumes de fotos, por ejemplo, se despliegan al completo y en un instante. La navegación de una página a otra de imágenes también es inmediata y los iconos de las imágenes se dibujan en la pantalla prácticamente al mismo tiempo en que accedemos a la página. Se pueden dejar abiertas varias aplicaciones al mismo tiempo y en ninguna de ellas se aprecia un menoscabo en su rendimiento.
Mención aparte merece la función Pop Up Play, que permite mantener en pantalla un vídeo reproduciéndose sin problemas al mismo tiempo que realizamos cualquier otra función, como escribir un correo, consultar el calendario o navegar por internet… El vídeo se hará mas pequeño, pero seguirá corriendo y reproduciendose sobre la segunda aplicación que hayamos decidido abrir. Realmente impresionante y todo un alarde de las capacidades del nuevo procesador.
La cámara, aunque incorpora el mismo sensor que el anterior SII, cuenta sin embargo con nuevas funciones que resultan de lo más útil. Por ejemplo el disparo en ráfaga, hasta ocho fotos seguidas de las que el terminal nos propone la mejor. O la posibilidad de capturar imágenes al mismo tiempo que grabamos un vídeo, una función que también incorporan los nuevos terminales de la competencia (como el ya citado HTC One X).
El teclado, por su parte, responde a la perfección y su tamaño en pantalla hace que sea realmente cómodo escribir, tanto en el correo electrónico como en los varios procesadores de texto disponibles en Play Store, la tienda de aplicaciones de Android.
Y hablando de aplicaciones, resultan destacablas las que Samsung ha decidido implementar en su nuevo móvil, como una capa de software exclusivo de la marca y desplegada sobre el sistema operativo, Android Ice Cream Sandwich 4.0. El SIII está, según reza su eslogan “diseñado para humanos”, y eso se traduce en que, literalmente, el terminal es capaz de ver, oir y “entender” al usuario que lo maneja. Por ejemplo, un sistema de reconocimiento de retina “sabe” en todo momento si el usario está mirando el móvil y evita que se apague la pantalla, o que ésta cambie de orientación (vertical u horizontal) aunque cambiemos de posición.
El sistema también incorpora la aplicación S Voice, que es capaz de “comprender” (y en castellano) un amplio abanico de órdenes emitidas con la voz. La función se activa pulsando dos veces seguidas el botón físico del terminal (debajo de la pantalla) y podemos preguntarle directamente por el tiempo que hace, o decirle que saque una fotografía, que envíe un correo electrónico o que abra una aplicación. Sí, es cierto, esta aplicación se parece extraordinariamente a SIRI, la revolucionaria función de voz presentada hace unos meses por Apple en su IPhone 4S aunque, a diferencia de ella, no permite el uso de “lenguaje natural”. Para dirigirse a SVoice podemos utilizar un amplio catálogo de palabras, que cubren prácticamente cualquier necesidad básica, aunque hay que reconocer que el sistema no es perfecto y comete más de una equivocación.
En cuanto a las tarifas, los distintos operadores han intentado dar lo mejor de sí mismos para este lanzamiento. Telefónica, por ejemplo, marca un precio de salida para el Galaxy SIII de 638 euros y ofrece la posibilidad de financiarlo durante 24 meses en cuotas de 26 euros. El precio inicial, sin embargo, puede ser menor en función de la tarifa que se tenga contratada. Vodafone, que aún mantiene una fórmula de financiación de terminales, da la posibilidad de hacerse con el nuevo Galaxy desde cero euros (si se contrata la tarifa XL, de 80 euros al mes), un precio que se va incrementando hasta los 479 euros si optamos por la tarífa más pequeña, la XS, de 20 euros al mes. Orange ofrece el terminal algo más barato, a 529 euros si se opta por su tarifa Ardilla.
Fuente: Diario ABC
Enlace patrocinado por
info@ingeypro.com
ingeypro.  Servicios: Planes de Gestión de Residuos, Gestión de Obras, Planes de Seguridad y Salud, Eficiencia Energética, presupuestos, estudios de obras, Oficina técnica
Ingeypro en Cáceres, Madrid y Sevilla

No hay comentarios:

Publicar un comentario